mis rescates.

Las cosas que rescato de este año como creadora de contenido y lectora

A veces siento que el tiempo vuela y que lo único que me queda para medir el paso de los días son los libros que leo y las experiencias que acumulo. Este año ha sido una montaña rusa de emociones y aprendizajes, pero al hacer un balance, me doy cuenta de que hay mucho que agradecer. Aquí comparto las cosas más valiosas que me ha dejado este año como creadora de contenido y lectora.

Amistades que nacen entre páginas
Hacer amigas nuevas siempre es un regalo, pero hacerlo a través de los libros tiene un significado especial. La lectura, aunque es un pasatiempo solitario, me ha permitido conectar con personas maravillosas. No quiero dejar nombres en el tintero, pero sepan que cada una y cada uno de ustedes ocupa un lugar especial en mi corazón.

Además de las amistades a distancia, hay algo único en las relaciones que nacen en el club de lectura. Es un espacio seguro donde nos encontramos, compartimos nuestras lecturas y, sin darnos cuenta, creamos lazos profundos. Ver cómo esas conexiones crecen es una de las cosas que más me emocionan.

Conocer a mis ídolos literarios
Este año tuve la oportunidad de acercarme a autoras y escritores que admiro muchísimo. Gracias a los medios digitales, esa barrera entre lector y creador se reduce, y siento que este año aproveché esa cercanía como nunca antes. Cada conversación con ellos ha sido un recordatorio de por qué amo tanto los libros.

Dejar fluir la creatividad
Aprendí que la creatividad es como un músculo: necesita ejercitarse. No siempre es fácil, pero darle espacio a mis ideas y trabajar en ellas ha sido un gran aprendizaje. Cada publicación, cada proyecto, es un pequeño logro que celebro.

Defender mi espacio y mi comunidad
Este año también me enseñó la importancia de poner límites. No faltó quien quiso robarse lectoras o aprovecharse del trabajo que he construido con tanto amor. Aprendí a defender mi comunidad y mi espacio con firmeza porque sé cuánto significa para mí.

Atreverse a pedir lo que uno desea
Dejar el miedo guardado y atreverme a pedir fue otro gran paso. Entrevistar a autores que admiro fue una experiencia increíblemente enriquecedora, y me recordó que muchas veces solo necesitamos dar el primer paso.

Hablar de libros en la radio
Uno de mis mayores logros este año fue cumplir el sueño de participar en la radio y, además, hacerlo hablando de libros. Poder invitar a más personas a leer y compartir mi pasión por la lectura ha sido un regalo que atesoro profundamente.

Mirando hacia adelante
Este año fue un recordatorio constante de que el camino no siempre es fácil, pero cada experiencia, buena o mala, me ha dejado algo valioso. Desde las amistades que surgieron hasta los proyectos que tomaron forma, todo ha sido parte de un viaje que espero continuar por mucho tiempo.

Si llegaste hasta aquí, gracias por leerme y por formar parte de esta comunidad. ¿Qué momentos o lecciones rescatan ustedes de este año como lectores? Me encantaría leerlos en los comentarios. ❤️